La ermita de Bellvitge y los santuarios urbanos modernos

Coincidiendo con la celebración, este viernes, de la Virgen de Bellvitge, se presenta el vídeo “La ermita y los santuarios urbanos modernos”, que se proyectará a partir de hoy 8 de septiembre en la ermita de la Virgen de Bellvitge , en Hospitalet del Llobregat. Se trata de una invitación a dar un paseo orando por los santuarios urbanos de Bellvitge.

A lo largo del año pasan unos 7.000 visitantes por esta ermita, que aparece citada por primera vez en un documento de 1057. Actualmente a su alrededor se ubican un parque, un gimnasio, un hotel, dos hospitales, una residencia sociosanitaria, una facultad de medicina, una tienda y un tanatorio, iconos de nuestra sociedad urbana. Una gran diversidad de confluencias humanas con intereses muy diversos, como son el cuidado del alma, de la naturaleza, del cuerpo, del viajero, de la salud, del saber,... Muchas personas pasan por delante de la ermita, camino a su destino. Así, este monumento histórico, cultural y espiritual de L'Hospitalet ofrece un espacio de acogida, de descanso, de escucha, de silencio, de meditación, de oración... para todo el mundo que transita de un sitio al otro. El vídeo que ahora se proyectará en este espacio hace hincapié en estos caminos cruzados y nos invita a fijarnos en cada uno de los santuarios urbanos que se encuentran a su alrededor.

La ermita es un espacio muy querido por los vecinos y vecinas y ha sido rehecha en varias ocasiones, después de sufrir inundaciones o saqueos en varios momentos históricos. Hace tres años se hizo la última remodelación, con la construcción de un cancel y la instalación de un nuevo mobiliario litúrgico con un diseño que recuerda a los bloques de vivienda característicos que se empezaron a construir a finales de los años sesenta en Bellvitge.

Su vinculación con la Compañía de Jesús se remonta justamente a finales de los años 60 cuando un grupo de jesuitas junto con un grupo de jóvenes y diversas religiosas se instalaron en el barrio de Bellvitge y empezaron a implicarse en la vida del barrio, trabajando y conviviendo con los vecinos, promoviendo iniciativas socioeducativas, trabajando en la construcción y comprometidos con las personas más desfavorecidas, etc. Hacía sólo cuatro años que se había iniciado la construcción del polígono de Bellvitge y los primeros bloques de viviendas, para acoger a las personas que venían a buscar trabajo en las fábricas del cinturón industrial de Barcelona.